La provincia de León puede presumir de ser la provincia con más reservas de la Biosfera de España, e, incluso, del mundo. En concreto, son siete las reservas de la Biosfera que puedes disfrutar en León:
Ancares leoneses
Valle de Laciana
Babia
Valles de Omaña y Luna
Alto Bernesga
Argüellos
Picos de Europa
Todas ellas cuentan con sus espacios protegidos para evitar su deterioro y luchar por la conservación de sus paisajes , de su fauna y su flora, de manera que perduren en el tiempo, y las siguientes generaciones puedan seguir disfrutando de ellos. León, por tanto, es una provincial de gran valor natural. as posibilidades de rutas de senderismo, paseos por sus valles y montañas, actividades y deportes al aire libre, etc., son incalculables. Por ello, la Diputación de León ha destinado más dinero a la conservación de las reservas de la Biosfera de su pprovincia, de manera que se puedan colocar más papeleras o contenedores o se pueda acondicionar el firme del Camino, incluyendo la reparación de tuberías, acequias o arquetas, desbroces, plantación de árboles o mejoras de las áreas de descanso. En concreto, la Diputación de León va a subvencionar hasta el 90 por ciento del coste total de las actuaciones que se lleven a cabo. El objetivo principal es el de contribuir a la recuperación demográfica y socioeconómica. También se atiende a los criterios de sostenibilidad ambiental, social y económica.
Es muy importante cuidar estas zonas, respetar su naturaleza, y luchar para su conservación. Son naturaleza viva, y uno de los pulmones más importantes de nuestro país.
Reservas de la Biosfera en León
Gracias a la puesta en marcha de esta iniciativa, podremos seguir disfrutando de los Ancares Leoneses, con sus frondosos y verdes valles, así como de los sotos de castaños centenarios. Asimismo, se podrá seguir degustando de sus productos omnipresentes, como el clásico botillo, sus embutidos o sus setas.
Por supuesto, el valle de Laciana, con sus altas cumbres. Todas ellas por encima de los dos mil metros, como el Cornón (2.188 m) o el Nevadín (2.082 m). Sus amplios bosques de robles, abedules, hayas, acebos, servales, fresnos y avellanos. Sus dos especies de animales más emblemáticas: el oso pardo y el urogallo cantábrico.
Poder "seguir en Babia" y perderte en sus prados y montañas.
Seguir contando con dos regiones con bioclimas únicos: la región eurosiberiana y la región mediterránea. Ambas propias de la Reserva de los Valles de Omaña y Luna.
Que no muera la minería del carbón en el Alto Bernesga. Además de seguir conservando un bosque de hayas centenarias, el Faedo de Ciñera.
El valle alto del río Torío, la erosión fluvial de la roca caliza que ha formado las Hoces de Vegacervera. También la Cueva de Valporquero. Todo ello en la Reserva de la Biosfera de los Argüellos.
O no perder la belleza de los "fiorodos leoneses" y el valle de Valdeón, el corazón de los Picos de Europa.
¡Por muchos años con Reservas de la Biosfera en León!
